Me encantan las tartaletas de frutas frescas. Aunque debo reconocer que me cuesta encontrar unas que me gusten en las pastelerías: o me parecen muy pesadas, con demasiada crema, o muy dulzonas por la cobertura, o incluso a veces insípidas. Por eso me gusta investigar en la cocina para preparar mi tarta ideal. Me gusta jugar con las texturas y suelo hacer muchas pruebas con todo tipo de masas (sobre todo con masas sin gluten, que son más difíciles de trabajar). Si buscáis un dulce sencillo, con sabores originales y muy ligero, estas tartaletas esponjosas con frambuesas y pistachos son ideales. Se componen de una masa quebrada de pistacho muy crujiente, rellena con una mousse suave y muy ligera de queso mascarpone y cubierta con unas frambuesas frescas que aportan un toque ligeramente ácido. Además, os revelo dos secretos para potenciar todos los sabores de estas deliciosas tartaletas. ¿Queréis saber más?
♦ RECETA ♦
Masa quebrada de pistacho:
200 g harina
125 g mantequilla
35 g de pistachos molidos (sin cáscara y sin sal)
50 g de huevo batido
35 g de azúcar glas
Una pizca de sal
Mousse de queso:
200 g de frambuesas
250 g de mascarpone
100 g de azúcar blanco
3 huevos
1 limón
Preparar la masa.
Tostar los pistachos en una sartén a fuego medio durante 5 minutos procurando que no se quemen. Una vez tostados, dejarlos enfriar y triturarlos hasta conseguir un polvo fino.
Reunir todos los ingredientes en un bol y amasar hasta conseguir una masa uniforme. Formar una bola y colocarla en la nevera al menos 30 minutos.
Seguidamente, engrasar ligeramente los moldes que se vayan a utilizar. Estirar la masa entre dos hojas de papel de horno, forrar los moldes, cubrir cada uno con papel de cocina y colocar encima un peso, tal como lo explico en la receta de la tarta de crème brûlée.
Colocar los moldes en la nevera al menos media hora.
Precalentar el horno a 180 ºC.
Hornear las tartaletas durante 15 minutos. Transcurrido este tiempo, sacar las tartaletas, quitarles el peso y volver a hornearlas 15 minutos más a la misma temperatura. Una vez hechas, sacarlas del horno y dejarlas reposar dentro del molde.
Preparar la mousse de queso.
Separar las yemas de las claras. Rallar el limón y sacarle todo el zumo. Batir enérgicamente las yemas con el azúcar hasta que la mezcla blanquee. Sin dejar de batir, añadir el mascarpone, el zumo y la ralladura del limón. Batir las claras a punto de nieve con una pizca de sal. Incorporar las claras montadas al queso con movimientos envolventes.
Rellenar las tartaletas con la mousse de queso. Añadir las frambuesas.
Hornear durante 20 minutos a 180 ºC.
Dejar enfriar y decorar al gusto (en este caso, con azúcar glas, pistachos troceados y ralladura de lima).
♦ CONSEJOS Y TRUCOS ♦
- Mi primer secreto: una cucharilla de té matcha en la masa para darle un toque verde más intenso y potenciar el sabor del pistacho. Si queréis utilizar té matcha en vuestros postres (o para cocinar), os aconsejo la variedad Chlorella Matcha. Se trata de un té verde japonés de calidad mezclado con un alga con gran concentración de clorofila, lo que le permite mantener el sabor y el color durante el horneado. Es un producto 100 % natural.
- Mi segundo secreto: un poco de jengibre fresco rallado en la mezcla de queso realza el sabor del limón y de las frambuesas. Una cucharilla de las de café será suficiente.
- Para una masa sin gluten, sustituir los 200 g de harina de trigo por 150 g de harina de arroz (mejor integral) y 50 g de almendras en polvo. Seguir la receta tal y como se describe.
Iván dice
Estas tartaletas tienen una pinta fantástica. Y parecen muy sencillas de hacer. Me encanta tu blog y te voy a seguir de cerca a partir de ahora.
dulcetradiccion dice
¡Gracias Iván!
becausegb dice
Estas tartaletas pintan pero que muy bien Sylvain. Me gusta además la imagen tan fresca y primaveral que tienen, entran por los ojos. Apunto lo del Chlorela Mtcha, un hallazgo!
Gracias por compartir!!
dulcetradiccion dice
¡Me gusta que te guste, Laura!
Yolanda Fernandez dice
Muy buena receta, que da ganas de probar otras variantes. Seguro que con un mousse de requesón magro también está muy rica.
Hice por cierto la crema de avellanas: salió de lujo.
Gracias por darnos tantas ideas.
dulcetradiccion dice
Claro Yolanda, yo propongo una receta pero existe una infinidad de posibilidades. Sin embargo, no te aconsejo que utilices un queso demasiado húmedo, ya que al hornear las tartaletas corres el riesgo de que se te desparramen. Me alegro de que la crema de untar haya salido bien. Cuidado, que es adictiva…
cocido de sopa dice
¡Woowwww! Otro «wow» más, Sylvain. Tal cual los vi por Facebook, sabía que no me iban a defraudar, y como nadie se conocer mejor que una a una misma, era seguro que iba a acertar con mi intuición. Me gusta el toque original del pistacho en la masa, me gusta el mascarpone transformado en una suave crema, y por no hablar de las frambuesas.
En casa tengo moldes que muy bien vendrían para este tipo de preparación, sin necesidad de recurrir a los papelitos. Me guardo tu receta, porque me ha encantado, por si no te habías dado cuenta ji ji ji
Saludos y feliz semana.
dulcetradiccion dice
Yolanda, eres un solete. Un beso!
abril dice
Uff..que truquitos tan buenos… aunque a mi el té verde no me gusta nada…aunque si sólo es por el color, lo tendré en cuenta. El jengibre por el contrario si que me gusta.
Estas tartaletas están geniales…tienen que ser tan suaves y buenas al paladar (me recuerdan a unas muffins de What Kate ate, pero estas creo que han de ser aún más ligeras).
Las fotos son suficientemente sugerentes!
dulcetradiccion dice
Gracias Abril. El té matcha le da un ligero sabor pero es opcional. También se podría echar un poco de aceite de pistacho. En este caso habría que echar menos mantequilla.
AniMayo dice
Esas tartaletas tienen una pinta estupenda; me apunto la receta 😛
Bss
dulcetradiccion dice
😄
Virginia dice
Sylvane esto es de pecado. Yo soy fan numero uno de las tartaletas de frutas, pero es cierto en las pastelerías las suelen hacer muy pesadas y muy dulzonas. Yo es que soy una chica muy sweet and sour y por eso me gustan el contraste de la fruta un tanto ácida con el dulzor de la masa. La idea de la mousse de queso me parece simplemnte sublime. Con tu permiso me la llevo. Bss
Virginia «sweet and sour»
dulcetradiccion dice
Por supuesto Virginia. Ya me contarás si haces la receta. Un abrazo.
silvia Diaz Aparicio dice
Hola!!me encanta la receta pero me gustaría saber las medidas para hacerla en un molde mas grande de unos 20-22 cm típico de tartaleta!
Un saludo y gracias!
dulcetradiccion dice
Hola, Silvia. Yo creo que con las mismas proporciones puedes hacer una tarta grande. Con relleno tendrás suficiente. Puedes, por ejemplo, doblar las proporciones de la masa y congelar lo que te queda. Un saludo, ¡ya me contarás!